08 mayo 2025

EN PAREJA


De megapíxeles a setas.

Esta parte de la entrada no tiene nada que ver con la foto que acompaña a la publicación. Se parecen lo mismo que un huevo a una castaña, pero me apetecía hablar del tema de las marcas y las cámaras y así lo voy hacer.

El mundo de las marcas fotográficas anda buscando nichos de mercado que le permitan conseguir balances económicos positivos. Por la reducción de costes y el objetivo de contentar a sus clientes, lanzan productos híbridos que mezclan la fotografía con el video. O puede que salte algún boom no previsto como está pasando a día de hoy con las cámaras compactas. Un segmento de la fotografía que estaba muerto y que está en pleno auge por la demanda sobre todo de los creadores de contenido.

Quien esté dentro de este mundo conocerá de sobra como va el tema del cacharreo. Cada pocos meses hay lanzamientos de cámaras y objetivos, versiones actualizadas de lo existente en el mercado que llegan con ligeras actualizaciones y una subida de precio considerable. 

También hubo una época donde había una guerra por meter en el mercado sensores con cada vez mayor número de megapíxeles de resolución, y las actualizaciones que comento más arriba corresponden a mejoras en: modos de enfoque que sobrepasan lo extraordinario, funciones mejoradas de video, geolocalización de ubicaciones, conectividad, nuevas funciones menores...  todo esto y más, en un tamaño cada vez más reducido y de menos peso.

En esta historia hay un eslabón débil que es el consumidor, ósea, nosotros.  Nos lo comemos todo con papas, nos brillan los ojos con cada novedad que sale al mercado, nunca estamos contentos con el equipo que tenemos. Siempre estamos pendientes del nuevo lanzamiento para sacar la calculadora y ver si nos podemos hacer con la nueva cámara.

Nuevos productos que han doblado su valor desde que llegase la pandemia en 2020, debido a los avances tecnológicos, la inflación de la materia prima o la demanda sobre material para la creación de contenido de calidad. A esto hay que sumar el cambio de sistema donde las cámaras réflex se está dejando de fabricar para dar paso a cámaras sin espejo, con el consiguiente gasto en cuerpos de cámara y objetivos específicos para este sistema. Costes que ni por asomo se parecen al realizado hace unos años cuando se adquiría un equipo fotográfico réflex de calidad. Dando lugar a un mercado de segunda mano encarecido en el sistema sin espejo, devaluado en el sistema réflex y con una descatalogación de lentes bastante severa por parte de las marcas.

¿De verdad que necesitamos estar a la última?, ¿Para hacer buenas fotos necesitamos el estreno del mercado al precio que sea?.

A nivel profesional desconozco como está el tema, es por ello que mi respuesta la dirijo al sector amateur que es el que conozco y donde me muevo. 

Sinceramente no se necesita tanta actualización. Si comparamos un negativo digital de una cámara fabricada hace 10 años, con un negativo digital de una cámara que acaba de salir la mercado, dudo que encontremos una diferencia abismal entre ambos ficheros. El mayor volumen de megapíxeles no va a ofrecer una mejor calidad de imagen, al contario, puede repercutir en la pérdida de calidad del negativo. Todo depende del tipo de sensor que monte la cámara, y la capacidad de cada celda del sensor para tratar los fotodiodos que reciba. A menor tamaño de la celda más problemas existirán para conseguir un negativo con calidad.

Las marcas apuestan por lanzar productos híbridos para contentar al fotógrafo, al videógrafo y al creador de contenido con un mismo producto, pero sin mejorar el resultado de la fotografía digital. De hecho, hay cámaras que están configuradas de tal manera para que un modo de escena, de prioridades, un modo programado o automático, obtengan mejor resultado del archivo fotográfico en JPG, que si utilizamos el modo manual de disparo y obtenemos un RAW. Y todo eso gracias al procesador de cada cámara y la configuración que este trae de fábrica. 

Si hacemos una foto sin calentarnos la cabeza va a salir bien, así seguiremos haciendo fotos, compraremos objetivos, accesorios y otra cámara si hace falta. Por lo tanto el JPG que descarguemos o la previsualización del JPG se verán de puta madre, así podemos enseñar "fotacas" a diestro y siniestro para demostrar que somos los mejores fotógrafos del mundo mundial, así seguiremos creyendo que somos buenos fotógrafos, no abandonaremos la fotografía y seguiremos consumiendo productos.

Si eres un apasionado a la fotografía y buscas un cuerpo de cámara, que solo capture fotografías sin que tenga vídeo ni chorradas varias, donde el desarrollo tecnológico mejore el resultado del negativo digital y otras herramientas relacionadas con la captura fotográfica, siento decir que eso no existe. Las marcas no apuestan por ese producto, ni lo desarrollan. Cualquier teléfono móvil tiene un procesador infinitamente mejor que una cámara sin espejo. ¿Os imagináis el procesador del iPhone 16 vinculado a un sensor de 35mm de 20 o 25 megapíxeles?.

Igual que ha pasado ahora con el boom de las cámaras compactas, que han vuelto a escena cuando estaban desahuciadas, confío en que llegará una época donde el video se separe definitivamente de la fotografía, y existan equipos específicos para cada cosa. Aunque a día de hoy esto parezca que no va a ocurrir en la vida, quien sabe donde puede tirar el mercado, o puede que los consumidores dejemos de ser borregos ante los fabricantes. Al fin y al cabo soñar es gratis, ¿por qué no hacerlo?.


La foto.

Esta pareja de setas las fotografié por puro placer. No son un tipo exótico, ni poco frecuente, ni nada por el estilo. Llevaba mucho tiempo sin hacer fotografía a "rastrapanza" y la luz cenital que llegaba a estos ejemplares me gustó. Razón simple, sencilla y suficiente para hacer una foto donde practicar la colorimetría. Por ejemplo.

La escena la tuve que limpiar de ramas, hojas y palitos, captaban demasiada atención por su forma compositiva en sus líneas, con el problema añadido de que no conducían a las setas y solo estorbaban.

Los elementos a fotografiar estaban en una pequeña pendiente que me pedía disparar con trípode o a mano alzada utilizando una velocidad que evitase la trepidación. Opté por la cámara en mano con un ángulo paralelo a los sombreros de las setas, que es la parte que se ve enfocada. Al no tener profundidad entre las setas y el fondo, utilicé una apertura de F2.8 para desenfocar al máximo el fondo y el entorno del primer plano inferior, dejando el filete de enfoque solo en un punto muy concreto del sombrero de ambas setas y suelo.

Para componer utilicé cómo eje imaginario el hueco que separa ambas setas, ellas quedaron desplazadas a los tercios generando cierta simetría. Si partimos la escena por la mitad cada lado se queda con una seta escorada a un lateral y orientada hacia el espacio negativo de su encuadre, a esta particularidad compositiva le sumo una pieza en el suelo enfocada a modo de punto compositivo que funciona como punto de entrada y de salida en el recorrido de la fotografía. 

El triángulo de exposición lo completé con una apertura de 1/160 y un valor ISO de 200, solo tenía que aguantar la respiración y apretar el disparador.

Ya con el RAW en el ordenador solo tuve que mejorar el reencuadre de la escena para que los márgenes laterales fuesen iguales tanto a derecha como a izquierda de la fotografía. Otro aspecto a tener en cuenta era el de potenciar el interés sobre las setas ya que la colorimetría general de la escena estaba dominada por tonos cálidos y verdes. Tras los ajustes básicos separé las setas del fondo para enfriar la colorimetría de este, y potenciar los tonos cálidos de las setas.

Este es el resultado. Una fotografía descriptiva sobre unas setas donde mi incultura micológica hace que no sepa el tipo que son, ni he googleado para evitar errores, si algún amigo de las setas quiere dar más información sobre la especie que es, se lo agradeceré enormemente.



Antonio José Muro | De megapíxeles a setas | En pareja


---

Según la Ley de propiedad Intelectual. Las imágenes o fotografías originales tienen derechos de autor desde el momento de su creación, por tanto, el creador decide si cede sus derechos, para que otras personas puedan utilizar la imagen libremente o si esta, tiene alguna licencia.

Si estás interesado en alguna de mis fotografías, contacta conmigo.

---


03 abril 2025

PRIMAVERA TROMPETERA

 

Hablando de naturaleza.

La primavera ya está aquí con sus alergias, colores, flores, insectos, y demás parafernalia. Estación del año esperada por muchos porque nos saca de nuestras casas después del letargo invernal, somos gente de hacer vida en la calle, que le vamos a hacer.

¿En la explosión de colores que estamos disfrutando, tiene cabida una fotografía de naturaleza sin colores? Está claro que no hablo de una fotografía bucólica, que no invita a la alegría propia de la estación, pero, es una variante fotográfica que lanza otro mensaje. 

Nos puede llevar a la reflexión sobre un tema, una denuncia en favor de la maltrecha naturaleza, un pensamiento sobre nuestro comportamiento en los entornos que nos rodean y con quienes nos rodean, puede tener innumerables lecturas además del propio anuncio de la primavera.

Por otra parte, asimilamos por defecto que una fotografía de naturaleza debe ser nítida, con colores vivos, o descriptiva sobre algún elemento propio de la época. Obviando por completo la ensoñación, la abstracción, la descontextualización del motivo, o algo tan simple como la creatividad, el lenguaje fotográfico o la propia composición.

Esto de la fotografía es un largo viaje del cual no sabemos donde queda la próxima estación, no hay un destino final. Es un continuo caminar donde se queman etapas según nuestra formación, motivación y tiempo que invirtamos en el hecho fotográfico. 

Por mi bagaje he dejado atrás la manía persecutoria de la definición, la nitidez y el tecnicismo. Busco otras cosas en una fotografía. Necesito que una foto me llame la atención, me emocione, o que me haga llegar un mensaje. Si no me dice nada de esto, al menos quiero que me invite a imaginar.


La foto.

Hay fotografías que aparecen solas, otras las tenemos que buscar y muchas se tienen que fabricar. La imagen que acompaña a esta publicación es de este último tipo de fotografías. 

Día de campo con el peque de la casa, la cámara conmigo, como no. A ratos jugando, a veces charlando y otras tirando piedras al agua, que es el deporte olímpico infantil. Aprovechando un momento de piedras al agua, estuve fabricando una fotografía con una pequeña flor que estaba comenzando a salir. 

Por mi situación la luz aportaba un interesante contraluz, no me apetecía utilizar esta a mi favor para obtener una fotografía descriptiva, así que aposte por quedarme en mi sitio, utilizar un plano contrapicado y comprobar si era capaz de usar el entorno de la manera más creativa posible.

Para la foto utilicé una focal fija de 85mm. macro. Mal llamada así por su cercanía de enfoque, no porque sea una herramienta específica para un fotógrafo de naturaleza, ya que carece de ciertas bondades que uno se podía encontrar en objetivos macro específicos, como eran el Tamron 90mm o un Sigma 105mm. Dejémoslo en que es una lente para fotografía de aproximación, pero eso es otra historia.

Con prioridad a la apertura y compensación de exposición, enfoqué de manera automática sobre la flor para posteriormente de manera manual desenfocar la escena a mi gusto. La flor destacaba entre las hierbas de alrededor, estas, aportaban contexto y textura. Trazos que aparecen en segundo plano e invitan a imaginar o intuir el entorno cercano a esta flor.

Sobre la composición aposté por centrar en la escena al elemento principal, comenzado a recorrer el encuadre desde el tercio inferior por el tallo hasta llegar a la parte superior con orientación de la flor hacia la derecha de la escena. Una cuestión compositiva efectiva y clásica que utilizo con mucha frecuencia cuando tengo solo un motivo de interés en la escena. Aunque la flor esté centrada, tiene una ligera caída hacia la parte izquierda de la foto para provocar su lectura de abajo hacia arriba y de izquierda a derecha.

Del resultado me quedo con el aire onírico de la flor en un acentuado tono negro, la abstracción del fondo en escala de grises que aporta contenido en la escena y destaca a la flor protagonista. Creando el conjunto de la imagen, una foto que proporciona un aire melancólico sobre la naturaleza. 

Cuando encuentre otra oportunidad, seguiré indagando en este mundo natural-irreal. De momento, hasta aquí llego.


Antonio José Muro | Primavera trompetera | Hablando de naturaleza


---

Según la Ley de propiedad Intelectual. Las imágenes o fotografías originales tienen derechos de autor desde el momento de su creación, por tanto, el creador decide si cede sus derechos, para que otras personas puedan utilizar la imagen libremente o si esta, tiene alguna licencia.

Si estás interesado en alguna de mis fotografías, contacta conmigo.

---


20 marzo 2025

LUNES SANTO 2025


Carteles en Cuaresma.

Que menos que agradecer a la Hermandad y Cofradía de Nazarenos de Nuestra  Señora de Gracia, el hecho de elegir una fotografía de mi autoría para editar su cartel "Lunes Santo".

Agradecer a Antonio Barrionuevo Martínez su buen hacer e interés en que esta fotografía fuese la base de este cartel que la Cofradía publica en cuaresma.

A continuación os dejo algunas líneas explicando la escena y el como se hizo la foto.


La foto.

La fotografía en cuestión está realizada la noche del Lunes Santo del año dos mil veintitrés, a la salida de la calle Pastores de Úbeda donde la Cofradía tiene ubicada su casa de Hermandad.

El encuadre nativo de la fotografía es en diagonal de izquierda a derecha con una proporción áurea, que fija el punto de interés sobre la talla Mariana. Para la edición de esté cartel, se cambia el encuadre nativo para que la Virgen de Gracia sea el eje principal y único de la escena en base al principio de centramiento, que en arte se atribuye a la máxima expresión de la belleza. Con este reencuadre de la escena se eliminan elementos carentes de interés en esta composición atribuidos al ambiente de la calle.

En la parte compositiva de la fotografía se pueden intuir dos líneas oblicuas que nacen a izquierda y a  derecha de la imagen, estas se apoyan en su camino por la luz que reciben los capiruchos de los nazarenos, reforzando estas líneas imaginarias cuyos vértices superiores tienen como punto de unión el centro de la escena donde se encuentra el paso de Nuestra Señora de Gracia. 

Es en este punto central de la escena donde la atmósfera que aporta el incienso genera un aspecto etéreo a la protagonista de la fotografía, la luz cálida de la candelería contrasta con los tonos fríos de la parte inferior de la escena y los tonos verdosos de la parte superior, la cual, acumula una masa de incienso y luz que hace rellenar ese espacio de la fotografía carente de interés, aportando contenido, textura y visibilidad para completar la escena en el tercio superior del encuadre.


Antonio josé Muro | Carteles en Cuaresma | Lunes Santo 2025



---

Según la Ley de propiedad Intelectual. Las imágenes o fotografías originales tienen derechos de autor desde el momento de su creación, por tanto, el creador decide si cede sus derechos, para que otras personas puedan utilizar la imagen libremente o si esta, tiene alguna licencia.

Si estás interesado en alguna de mis fotografías, contacta conmigo.

---