Noche de Martes Santo

 

Aprovechar las circunstancias.

En Semana Santa aparte de hacer fotografías de primer plano a las tallas que procesionan, también me gusta probar cositas que se salen de lo habitual en esta disciplina fotográfica.

De por sí es complicado sacar una fotografía nocturna dentro de la ciudad y que en ella aparezcan estrellas, pero si le sumamos una fotografía donde todo el contenido está en movimiento el tema se complica bastante.

Una muestra de lo que comento puede ser esta foto. Una exposición de veinte segundos que hice, gracias a que el alumbrado viario estaba apagado. Las únicas fuentes de luz venían de los propios domicilios, la candelería del paso de Las Lágrimas y un insufrible semáforo detrás mía que lo impregnaba todo de rojo o verde.

Reconozco que aquí si he tenido que hacer un laborioso trabajo de clonado con los cables que cruzaban la calle. Parece ser que el soterramiento de cables en esta ciudad está mal visto y sufrimos esa contaminación visual en todas las calles. Este tema no estaría mal tomárselo en serio más pronto que tarde, no hay calle o monumento libre de algún artefacto urbano que lo ensucie.

Volviendo al tema. En dos mil diecinueve todas las fotos que hice esa Semana Santa las basé en larga exposición. Para la mañana me ayudaba de un filtro ND y para la noche con la propia luz de las calles me bastaba para conseguir fotos con más de un segundo de exposición.

Todavía me acuerdo cuando el Domingo de Ramos a las seis de la tarde me presenté con el trípode en la puerta de la Iglesia de la Trinidad bajo un sol de justicia. Todo el mundo con cámara en mano se estaban haciendo mistos con el contraluz que había en ese momento. El caso es que me miraban como un bicho raro, algunos se preguntaban que hacía, pero no me lo preguntaban a mi. Hasta que llegó Jesús Delgado y me dijo: "Chache, ¿que estás haciendo con el trípode que están todos preguntando que haces?. Larga exposición Jesús", esa fue mi respuesta, corta, concisa y simple.

Lo de utilizar la larga exposición me vino bien parar limpiar de los encuadres, a los que se quedan a vivir en medio de los guiones haciendo el primer plano al rostro de la talla que procesiona. También me proporcionó fotos que hasta la presente no he visto en autores de esta temática ni en redes sociales.

Hace poco me compré in filtro IR para fotografía infrarroja. Aún no he visto resultados de lo que he hecho, pero me llama la atención utilizarlo esta Semana Santa. Aunque deberá ser de día por los tiempos de exposición que se usan. Por la noche es posible superar los catorce minutos de exposición y puede ser un caos a todos los efectos su utilización en esta temática, aunque no lo descarto.

Todo se andará.

Noche de Martes Santo

Vamos con la foto.

Esta foto la hice con un 17-50mm en su focal de 50mm. Enfocado con distancia hiperfocal en una apertura de F2.8, un ISO100 y 20 segundos de exposición. Son los elementos que componen el triángulo de exposición de esta toma.

Opté por ese tiempo de exposición para evitar que el final del descanso de los costaleros, la foto se quedase en nada por el movimiento del paso. De haber subido la ISO, las luces de las velas hubiesen aumentado su presencia y habrían quitado interés al cielo, aunque en este aparezcan pocas estrellas al menos se ven. Con más ISO dentro de ciudad no había salido ninguna.

La foto como es natural está hecha con trípode teniendo en cuanta, la luz que emitía el semáforo que había tras de mi. Tuve que trabajar en el revelado el color del primer plano para quitar la dominante verde que emitía y se reflejaba en las personas. Es lo que más trabajo tiene sobre el color, el resto fue quitar cables de luz que cruzaban la calle, que también había unos cuentos.

Vamos a por mas.

Otro miércoles a la talega y otra foto "semanasantera" que sea asoma por el blog. La semana que viene, otra foto pasará por aquí para hablar de ella.

Para cualquier duda o consulta, la puedes hacer a través de los comentarios. Estaré encantado de contestar tus preguntas.

El viernes más y mejor.